En tiempos remotos, el ajo fue considerado como un afrodisíaco, en la actualidad unos autores japoneses ratifican esas propiedades; usado como moneda de cambio, es decir como dinero. Con un papel clave por su sabor fuerte y amargo, pero que agrega un toque increíble a la cocina, hasta una de sus propiedades más pintorescas: repelente de vampiros, indiscutiblemente el ajo ha desempeñado muchos papeles en la historia de la humanidad.